Elecciones 2015
Graduados Psicología UBA
TODO
SIGUE IGUAL
ELECCIONES
GRADUADOS PSICOLOGÍA 2015
AGRUPACIÓN
|
CANTIDAD
DE VOTOS
|
PORCENTAJE
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CONVERGENCIA ACADÉMICA
|
1035
|
57.89%
|
PSICÓLOGOS UyO
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471
|
26.34%
|
PEF
|
223
|
12.47%
|
GUAP (LIBRES DEL SUR)
|
53
|
2.96%
|
Con una mayor participación que en años anteriores, la representación
de lxs graduadxs en el Consejo Directivo, y de acuerdo a los resultados se
mantiene igual: tres miembros por la mayoría de Convergencia y uno por la
minoría de Unidos y Organizados.
Psicólogos En Frente (PEF), que centró su
campaña como lista independiente, obtuvo un resultado apenas menor que en la
elección anterior tanto en porcentaje como en votos, sin lograr vencer en
varios casos “al voto útil” o “en contra
de ….”
Durante los 3 días de las elecciones ha
quedado en evidencia lo que desde el PEF anticipamos y fuimos alertando durante
su desarrollo: la votación de nuestro Claustro estuvo copada en dos grandes
“aparatos” el del Estado y el del Rectorado de la UBA. A los ya conocidos taxis
y remises (un clásico trayendo a votar “empadronadxs” de Convergencia Académica)
ahora se suman combis estatales desde el ex CENARESO y organismos de los
Ministerios de Salud, Desarrollo Social y Justicia de la Nación (para los electores
de Psicólogos Unidos y Organizados). En sintonía con esto, las presiones de
Profesores Titulares y Adjuntos de Cátedras y Jefes de Servicios de Hospitales,
como así también de funcionarixs “de gestión” de ministerios “sugiriendo” a sus
auxiliares docentes, psicólogxs concurrentes y de planta y/o monotributistas
graduadxs en áreas ministeriales, respectivamente, qué debían votar. Nada que
envidiar a la acción de “punteros” del Conurbano en una elección clásica de
domingo.
Lamentablemente la disputa por el
Claustro de Graduados se trata de una “pelea por grandes kioscos” entre dos
aparatos (el radicalismo-shuberoffismo que dirige la UBA y nuestra Facultad y el
kirchnerismo que dirige el Gobierno Nacional) que, sin embargo, a la hora de
negocios leoninos, se asocian a través de Convenios (venta de servicios,
consultorías, transferencia tecnológica) que terminan, muchas veces, derivando
en denuncias penales por corrupción y renuncias escandalosas (como los casos
del Vicerrector Darío Richarte y el renunciante Decano de Ciencias Económicas,
José Luis Giusti). Lo mismo sucede al
momento de votar un presupuesto, otorgado por la Nación y aceptado por la
gestión radical/PRO-K que gobierna la
UBA , mientras los edificios sucumben, lxs docentes ad honorem siguen
sin cobrar y muchxs docentes interinxs con inestabilidad laboral. La
investigación, la extensión y lxs colegas que la desempeñan, más achicados por
falta de recursos.
En el medio de estos negocios entre la UBA y el Gobierno Nacional
quedan los graduadxs de Psicología y otras Facultades (docentes,
investigadores) quienes en el marco de estos “turbios” acuerdos desempeñan
tareas profesionales como “facultativos” en el sector público en condiciones de
extrema precarización laboral. No casualmente, de esto no se habló en la
elección puesto que ni Convergencia Académica ni Psicólogos Unidos y Organizados
denuncian en el Consejo Directivo esta creciente situación que día a día se
agrava.
Mientras, los destinos de la salud y educación pública como los
de sus trabajadores egresados de nuestra Facultad se deterioran día a día. A
pesar de la aprobación y reglamentación de la Ley Nacional de Salud
Mental (cuya –no- aplicación de muchos de sus artículos ya está trayendo un
profundo debate y polémica entre distintos colectivos al interior de las
propias filas oficialistas) las corporaciones médicas continúan ampliando su
hegemonía y poder y los laboratorios han sido uno de los sectores de mayores
ganancias en los últimos años. Mientras
el Hospital Público continúa en proceso de derrumbe los efectores y
dispositivos sustitutivos y comunitarios de reinserción e inclusión social en
el campo de la Salud
Mental , planteados por la Ley 26.657 siguen prácticamente
–salvo algunas excepciones- brillando por su ausencia en el sector público de
Salud Mental. Por otro lado, el Gobierno de la Ciudad ha decidido
suplantar la Residencia
en Salud Mental en Hospitales Públicos por una Residencia en Psiquiatría y otra
en Psicología, lo cual es la lisa y llana eliminación de la concepción
interdisciplinaria presente en las leyes de Salud Mental que está vigentes para
la formación de recursos humanos en el ámbito público.
No es mejor la situación de los colegas que se desempeñan en
otras áreas, estatales, municipales o privadas, obras sociales, prepagas y ONG,
donde reinan los contratos basura, la relación laboral encubierta , la
precarización tanto en cuanto a la legislación laboral como en lo salarial. Pero de esto no se habló en la elección, la real situación de lxs graduadxs no ocupó el debate entre las listas sino que quedó perdido en la lucha
puenteril de los dos grandes aparatos que disputaban.
El apoyo de lxs graduadxs al PEF, si bien no alcanzó para recuperar un lugar en el Consejo Directivo, refleja la visión de muchos respecto a esta dura realidad y
el apoyo de una salida independiente y de lucha por nuestras reivindicaciones y
por una universidad y facultad distinta. Marcamos con nuestra lista y nuestro
trabajo continuo una opción diferente y una manera de buscar una salida .
Sobre esa base, Psicólogos En Frente (PEF), sin “aparato” ni recursos públicos (ni de
